Tiene un color rojo brillante y una piel delgada, con un sabor suave a picante y un toque afrutado, ligeramente dulce y ahumado. Su perfil de sabor lo convierte en un ingrediente clave para salsas, moles y marinados, aportando un sabor profundo y un leve calor que realza cualquier platillo. Es ideal para dar complejidad a guisos, carnes y sopas.
Valoraciones
No hay valoraciones aún.